Piden al presidente Medina detener atropellos contra familias en La Ciénaga y Los Guandules

Exigen trato justo a la comunidad. Quieren el diálogo, pero si no, van a ir a las calles, harán piquetes, encendido de velas, y mediante distintos métodos de lucha.

Distrito Nacional, RD. El diputado Ramón Bueno, Partido Revolucionario Moderno, PRM, en la Circunscripción #3, del Distrito Nacional, la asociación de Comerciantes y líderes comunitarios de los barrios Los Guandules y La Ciénaga hicieron un ferviente llamado al presidente Danilo Medina a que detenga la forma en que son desalojados de sus viviendas.

Los voceros de los moradores de dichos barrios acusan a la Unidad Ejecutora para al Readecuación de la Barquita, URBE, la que ahora está apoderada de los trabajos en los citados sectores de la orilla oeste del rio Ozama de engañarlos, atropellándoles, sacándolos por la fuerza de sus viviendas que, según ellos, han habitado por decenas de años.

Consideran que, tanto de la institución que ejecuta los desalojos, como de su director, el empresario José Miguel González Cuadra, están abusando de los habitantes de Los Guandules y La Ciénaga al iniciar un desalojo sin garantizarles destinos ni techos seguros, ofreciéndoles míseras cantidades de dinero, las cuales no le dan posibilidades de, ni siquiera, alquilar otra vivienda.

“Tengo visitando la Ciénaga desde hacen 40 años, cuando se comenzó a formar como barrio, ninguna calle estaba asfaltada ni tenia cemento, eso quiere decir que conocemos ese barrio desde su formación. Ahora, tanto Los Guandules como La Ciénaga enfrentan un desalojo que el Estado Dominicano ha estado llevando a cabo. No nos oponemos al desalojo, ni los comunitarios, ni los legisladores ni los residentes tampoco.” Dijo el diputado Bueno.

Reiteró que se está dando un desalojo atropellante a favor de una parte pequeña y en contra de la mayoría, violando e irrespetando sus derechos humanos.

Informó que la Comisión de los Derechos Humanos en la Cámara de Diputados intervino, escuchó a los moradores y los ejecutores de los desalojos, incluyendo a González Cuadra, quienes se comprometieron detener las actividades para buscar acuerdos y darle un carácter humano a la situación.

Juan Pablo Hiciano, presidente de la Asociación de Comerciantes de La Ciénaga, Por su parte, también se queja que las promesas de reubicación que les hiciera la URBE no se cumplen, esta, dijo, “ni nos quiere reubicarnos, no nos quieres proteger, siendo pequeños empresarios que brindamos empleos, servicios y cuidamos el barrio”.

“Además de que somos nativos de aquí, la URBE nos ofrece una cantidad de dinero que no nos permite reponer ni siquiera una paletera. Ese barrio lo hicimos nosotros los moradores, por lo que es un abuso”.

Dijo que el sector comercio de aquí está en una incertidumbre, no tiene rumbo, ni destino cierto de donde irán y sus pequeños capitales, que son el sustento de sus familias son demolidos por el abuso de poder.

Piden la intervención del Presidente Danilo Medina, sea que realice una visita sorpresa al barrio o que les reciba en sus oficinas del Palacio Nacional.

Jesús Martínez, Alejandro Made y Ruddy Betances, representantes comunitarios y de los Derechos Humanos, dicen que una 1, 400 familias están siendo abusadas.

Aseguran que familias que han realizado su vida, han construido sus viviendas, hoy les están derribando su casa, y solo le dan la fotocopia del cheque, para cuando se muden, entregarles el original, teniendo que irse la gente a correr suerte sin rumbo.

Citaron el caso una familia que tuvo que irse a San Francisco de Macorís, donde por muchos años no habían, ni siquiera pasado por esos campos.

Narraron: “Primero nos plantearon un proyecto integral, es decir, hacen las viviendas, mejoradas en la propia comunidad. Esto fue aceptado, pero al correr de los días, observamos que todo era mentira, un engaño”

. Citaron el caso de una señora llamada Bellanira, quien está arrimada con su hijo, quien es un niño con condiciones especiales.

Presentaron un levantamiento de todas las familias, mas de 200, que les han demolido sus viviendas, y han sido declaradas de utilidad pública y no le dan un centavo.

Exigen trato justo a la comunidad. Quieren el diálogo, pero si no, van a ir a las calles, harán piquetes, encendido de velas, y mediante distintos métodos de lucha.