La espiral del silencio y las redes sociales

opinión, Periodismo y Sociedad. La espiral del silencio es un concepto que propuso la politóloga alemana Elisabeth Noelle-Neumann. Este concepto describe la tendencia que mostramos las personas a no exponer públicamente nuestras opiniones cuando somos conscientes de que estas no son mayoritarias.

Para que una opinión mayoritaria sea susceptible de promover una espiral del silencio debe de contener un componente ético. Noelle-Neumann explica que la espiral del silencio se debe principalmente a dos tipos de miedo: el que se siente al quedar aislados socialmente y el temor a consecuencias más significativas sobre las últimas acciones. Depende cuánto miedo tenemos es el grado de resistencia a mostrar una opinión diferente a la del grupo.

Imagine un grupo de WhatsApp conformado por personas que en su mayoría son Anti-AMLO. Seguramente en ese grupo hay personas que simpatizan con las ideas de López Obrador, pero no se pueden manifestar por temor a represalias, como que lo llamen chairo o ignorante. Opiniones cargadas como “los que votaron por AMLO son ignorantes y en muchas ocasiones de otro nivel social” hacen que los involucrados que tienen simpatía se queden callados pues saben que si expresan su opinión los criticarían fuertemente.

Lo mismo pasa en un grupo donde la mayoría son seguidores de López Obrador, si hay alguien que tiene otro tipo de pensamiento seguramente será criticado y tachado de fifí y neoliberalista.

Que pasa más adelante, la opinión disidente del grupo se va apagando, quedándose en silencio y al final termina por apagarse haciendo creer al grupo que la idea de la mayoría es la idea de todos en el grupo.

¿Qué pasa con las redes sociales? En nuestros tiempos, mucha gente le cree más a lo que ve en las redes sociales que lo que ve en los medios de comunicación. Grupos minoritarios que tengan la capacidad de hacer el ruido suficiente pueden hacer que estos mensajes lleguen a más personas convirtiéndolos en ciertos, aunque no lo sean.

Ejemplo, hace poco en uno de mis grupos de WhatsApp llegó un mensaje de Gilberto Lozano. Si lo ha escuchado, puede llegar a convencerlo pues es de esos oradores que con los gritos e insultos convertidos en reclamos busca convencer personas. En ese grupo muchos de los que opinaban estaban de acuerdo con lo que decía Lozano, al menos eso parecía. Sé que a muchos no les gusta el estilo de Lozano, pero por el efecto de la espiral del silencio callaron su opinión.

Del otro lado, también hay personas que les llegan mensajes del diputado federal Fernández Noroña y los convierten en manada del grupo. Estoy también seguro que hay personas que no piensan lo mismo que Noroña, pero el miedo al aislamiento a la crítica.

¿Quién puede romper la espiral del silencio? Solo las personas que no les importa ser aisladas socialmente o que no les importen las criticas sociales son las que alzan la voz. Me ha tocado ver en algunos grupos a esa persona que tiene una opinión contraria y la expresa y es cuando usted puede ver una carretada de mensajes en discusión pues uno de los miembros del grupo opinó contrario a la mayoría, que en muchas ocasiones no es mayoría sino los únicos que opinan.

¿Qué hay que hacer? La verdad depende de cada uno. Es probable que sus grupos de amigos, la gente que sigue en las redes sociales y los medios de comunicación que lee y escucha sean muy parecidos entonces puede que no viva un espiral del silencio. Usted puede ser el que provoque la dichosa espiral o puede ser víctima de él.

Al final las opiniones en ciertos grupos sociales pueden llegar a basarse en noticias falsas o en cosas que grupos minoritarios de opinión quieren que pensemos.

¿Usted ha estado en un grupo donde no externa su opinión por temor a represalias? ¿O por la flojera de tener que lidiar con grupos que creen tener la verdad? En tiempos de tanta polarización, las espirales del silencio son más comunes de lo que usted cree.

Fuente: Ricardo Pedraza/laestrelladeoriente56.com

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